Pez Napoleón

Pez Napoleón

Un pez exquisitamente modelado, el gigante pero suave pez Napoleón, es uno de los favoritos a encontrar por los buceadores en muchas regiones del mundo. Esto se debe a que, en las zonas donde todavía no rehúyen el contacto con los seres humanos, los peces Napoleón parecen buscar activamente la interacción táctil, e incluso han llegado a formar enlaces con los buceadores individuales, a los cuales reconocen e incluso buscan.

Muy a menudo esta especie se acerca a los buzos, usando sus ojos itinerantes constantemente y examinando sus movimientos para cerciorarse de que no haya peligro.

El humano por su parte mira en los ojos del pez y no puede dejar de ser golpeado por la inteligencia y la conciencia obvia de este animal que parece disfrutar de las caricias y por ello se apoyan contra la presión de la mano de un buzo. A veces incluso, le dan al visitante un pequeño empujoncito, al igual que actúa un perro cuando quiere ser acariciado.

Características distintivas

El pez Napoleón se puede reconocer al instante por su tamaño, color y forma. Es uno de los mayores peces de arrecifes en el mundo y algunos ejemplares pueden crecer hasta 2,30 metros, y pesar 190 kilogramos.

Tiene labios carnosos y una joroba en la cabeza que es similar a un sombrero napoleónico, de ahí el nombre. Dicha joroba se hace más prominente con la edad.

Características distintivas del pez Napoleón

Los colores varían con la edad y el sexo. Los machos van desde un azul eléctrico brillante a verde o azul violáceo. Los machos adultos desarrollan una raya negra a lo largo de los lados, con manchas azules en sus escalas del cuerpo y garabatos azules en la cabeza. Los jóvenes pueden ser identificados por su color verdoso pálido y dos líneas negras que corren detrás del ojo. Las hembras, tanto jóvenes y viejas, son de color rojo o naranja en la parte superior de sus cuerpos, y de rojo-naranja a blanco a continuación.

Este pez además tiene una boca protrusible, con los dientes de la mandíbula separados y sobresaliendo hacia el exterior.

Comportamiento

El pez Napoleón pasa la mayor parte de su tiempo durante el día alimentándose. Los adultos son generalmente solitarios y pasan el día vagando por el arrecife para luego volver a cuevas o repisas particulares, en las que descansar durante la noche.

En algunas áreas los ejemplares son muy curiosos, pero en otras donde son cazados son muy tímidos. En el mar Rojo es un pez muy curioso, ya que han sido alimentados con huevos duros. Sin embargo, hoy en día está prohibido alimentar el pez Napoleón con huevos, debido al alto nivel de colesterol que se encuentra en especímenes muertos de la zona.

Hábitos alimenticios del pez Napoleón

Hábitos alimenticios

Los peces Napoleón son carnívoros y comen durante el día. Se les puede ver alimentándose de crustáceos, otros peces, estrellas de mar, erizos y cangrejos, aplastando las conchas para llegar a la carne del interior. También aplastan grandes trozos de escombros de coral muerto con los dientes como para alimentarse de los mejillones de madriguera y gusanos.

Asimismo, son uno de los pocos depredadores de animales tóxicos como liebres de mar, pez cofre y la estrella de mar “corona de espinas”, y son, por tanto, una parte importante de la cadena alimenticia marina en el mantenimiento de un arrecife de coral equilibrado y saludable.

Reproducción

Las parejas de Napoleón desovan juntas como parte de un grupo más grande de apareamiento que puede consistir en más de 100 individuos. Los huevos planctónicos se liberan en el agua, y una vez que las larvas han eclosionado van a depositarse sobre el sustrato. Las hembras adultas son capaces de cambiar de sexo, pero los factores desencadenantes de este desarrollo no se conocen aún.

Ciclo de la vida

Estos peces tienen vida extremadamente larga. Son conocidos por vivir durante al menos 30 años y les toma alrededor de cinco a siete años alcanzar la madurez sexual, lo que significa que son muy lentos para aumentar las poblaciones.

Depredación del pez Napoleón

Depredación

Con la excepción de los grandes tiburones, hay pocos depredadores que podrían enfrentar un adulto Napoleón. Al igual que con la mayoría de otras criaturas marinas, los seres humanos son su mayor amenaza.

Distribución

Esta especie se encuentra en todas las regiones del Indo-Pacífico, desde el Mar Rojo y la costa del este de África hasta el Pacífico central, desde el sur de Japón hasta Nueva Caledonia. Es muy poco frecuente en el sur de Asia Oriental debido al comercio de los restaurantes asiáticos y la pesca ilegal, pero es muy común en el Mar Rojo y las Maldivas debido al control de guardaparques.

Hábitat

El pez Napoleón se encuentra principalmente en los bordes de los arrecifes de coral y bajadas. Los jóvenes se encuentran entre los corales ramificados de lagunas poco profundas, mientras que los adultos prefieren los márgenes superiores de pináculos, lagunas claras y laderas empinadas de arrecifes de coral, a una profundidad de por lo menos 100 metros, pero en ocasiones de hasta 160.

Se mueven en bahías poco profundas durante el día para alimentarse, y tienden a moverse hacia aguas más profundas a medida que crecen y se hacen más grandes. Los adultos, por lo tanto, son más comunes en alta mar que en la bajura.

Cheilinus undulatus

Consideraciones Ecológicas

Aunque el pez Napoleón tiene una amplia distribución, nunca ha sido un animal común y los informes recientes han puesto de manifiesto un preocupante descenso en sus números poblacionales. Los rasgos de su ciclo de vida hacen que esta especie sea extremadamente vulnerable a la explotación y la pesca. El cianuro se utiliza normalmente para capturar este pez, porque los peces vivos son difíciles de tomar de cualquier otra forma. Esta es una práctica que destruye los arrecifes de coral.

El pez que nos ocupa está en la “Lista Roja de Especies Amenazadas” de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN) y aparece como amenazada y por tanto a ser protegida en los informes resultantes de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES).

Especialistas de la UICN trabajan actualmente en la recopilación de datos sobre las poblaciones y en acciones encaminadas a aumentar la conciencia de las personas en lo referente a la necesidad de proteger a esta criatura. Las restricciones comerciales son particularmente importantes ya que esta especie no puede ser criada en cautividad, y todas las personas que han visto ejemplares en restaurantes y mercados de pescado deben saber que provienen de la naturaleza, y por tanto dejan entrever en ocasiones la violación de normativas existentes por parte de los captores.

Fotos del pez Napoleón

Tradicionalmente, la carne de este pez ha sido muy apreciada y más recientemente se ha convertido en una de las especies más grandes y prestigiosas en la industria de alimentos de lujo, debido al aumento de la popularidad del pez Napoleón en muchos países de Asia oriental.

El pez Napoleón es tristemente más frecuente en pequeños acuarios de restaurantes de mariscos en Hong Kong, donde se pueden adquirir a un precio de hasta 100 dólares por kilogramo, o hasta 400 para un conjunto de labios. Como sus números disminuyen, la rareza de la especie es probable que condicione un aumento aún mayor en los precios.

No obstante, lo más importante es perseverar en la generación de conciencia y solidaridad con las causas que buscan la conservación del pez.

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